Sobre el tarot

Las primeras cartas para jugar, llegaron a Europa en la segunda mitad del siglo XIV, provenientes del Medio Oriente, y fueron creadas en China, unos 300 años antes; al principio se utilizaban como juegos de azar, por lo que fueron prohibidos en numerosos lugares; sin embargo, en 1781, las cosas cambian radicalmente, Gébelin, publica un ensayo que indica que sus cartas tienen relación con los misterios egipcios de adivinación y a partir de ahí empieza el auge de lecturas de tarot, desde el punto de vista de la  adivinación.

Se componen de arcanos menores y arcanos mayores.

ARCANOS MENORES

LOS OROS: se refieren a lo concreto y material, dinero. LOS BASTOS: se refieren a lo vital, actividad, trabajo, movimiento. LAS ESPADAS: se refieren a lo intelectual y la toma de decisiones, sufrimiento. LAS COPAS: se refieren a lo emocional, sentimientos, relaciones. Mientras mayor es el número, mayor es la intensidad del significado. Las Sotas se relacionan con oportunidades, ofrecimientos, El caballero se relaciona con la manifestación material, la reina con el aspecto vital, el rey al objetivo conseguido. Si una carta está dada la vuelta, no significa algo malo por sí mismo. Más bien, se refiere al aspecto “negativo” del significado de la carta, ya sea por exceso o por defecto.

ARCANOS MAYORES – son 22

EL LOCO: creación. EL MAGO: empiece, actuación con astucia, inspiración, creatividad. LA PAPISA: el subconsciente. LA EMPERATRIZ: primavera, vida, imaginación. EL EMPERADOR: razón, control, orden. EL PAPA: aprendizaje, intuición, autoridad, fe. LOS ENAMORADOS: belleza, amor universal. EL CARRO: avance, voluntad, viaje. LA JUSTICIA: equilibrio, justicia, dedicarse a lo mismo de siempre. EL ERMITAÑO: sabiduría, introversión, prudencia. LA RUEDA DE LA FORTUNA: karma, equilibrio en movimiento, destino, lo que te trae el devenir sin intervenir tu. LA FUERZA: valentía, libertad, autodominio, insistencia, lucha, lucha por lo que se quiere conseguir, constancia. EL AHORCADO: (experiencia, caridad, actuar justo). LA MUERTE: cambio, renacimiento. LA TEMPLANZA: templanza, espiritualización. EL DIABLO: lo instintivo, visceral, las apariencias, todo lo que te hace esclavo, vicios, ataduras, obsesiones. LA TORRE: el darse cuenta, el cambio de consciencia, cambios bruscos, ruptura de rutinas, ruptura de todo lo que tenías anteriormente. LA ESTRELLA: esperanza, proyectos, renovación, tranquilidad, belleza, destino. LA LUNA: el cuerpo físico, las pasiones, el engaño, la sombra, lo oculto, los miedos. EL SOL: conciencia, energía espiritual y vital, personalidad. EL JUICIO: despertar, adquirir juicio. EL MUNDO: realización total.

Asimismo existen combinaciones entre ellas de 2, 3 y hasta 4 cartas que tienen diferentes significados adivinatorios. También las cartas tienen número donde entra en juego la numerología y símbolos cabalísticos y el conjunto de todos ellos combinados dan unos significados muy verídicos.